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A la hora de invertir en bolsa, puedes recurrir al apoyo de un analista de inversiones. Se trata de un profesional que analiza el comportamiento de los mercados y los diferentes tipos de activos para, a continuación, ofrecer recomendaciones de compra o venta.

En este artículo te contamos cuál es el rol del analista de inversiones y cuáles son sus funciones.

¿Qué es un analista de inversiones?

Un analista de inversiones es un experto financiero cuya tarea es investigar el comportamiento de empresas, sectores, mercados, activos o productos, con el objetivo de facilitar a sus clientes la mejor información para que puedan tomar sus decisiones inversoras, así como recomendarles oportunidades concretas de inversión.

Los analistas de inversiones suelen trabajar para entidades financieras, agencias de valores, corredores de bolsa o fondos de inversión. También pueden ofrecer sus servicios de asesoramiento y recomendaciones de manera independiente a inversores particulares, institucionales o corporativos.

Funciones del analista de inversiones: qué hace

La principal tarea de un analista financiero es evaluar los mercados financieros y los diferentes tipos de inversiones disponibles para asesorar a sus clientes en la toma de decisiones de compra o venta de activos, y ayudarles así a gestionar su cartera de inversiones.

Análisis de los mercados financieros

Una función fundamental del analista financiero es hacer seguimiento de los mercados, para identificar posibles oportunidades de compra o venta o anticiparse a tendencias alcistas o bajistas en bolsa. Para ello han de estar al día en información financiera de empresas y sectores, políticas monetarias y otros cambios regulatorios y eventos geopolíticos, pues todo ello afecta al comportamiento de los mercados.

Selección de inversiones

Para seleccionar inversiones, los analistas financieros recurren a métodos como el análisis técnico y el análisis fundamental. A través del análisis técnico estudian gráficas y datos históricos de la evolución de precios y volúmenes de negociación de activos para identificar tendencias y predecir futuros movimientos en los mercados.

Por su parte, a través del análisis fundamental los analistas tratan de evaluar el valor intrínseco de un activo (si está infra o sobrevalorado), examinando factores que pueden afectar a su precio, como el desempeño de la empresa (en el caso de acciones, por ejemplo) o las condiciones macroeconómicas y del mercado.

Gestión de carteras

Otra de las responsabilidades de un analista financiero es la gestión de las carteras de sus clientes, decidiendo qué composición mantener, qué activos comprar o vender en cada momento para maximizar los rendimientos, así como, en general, proporcionando orientación sobre cómo diversificar estas carteras.

Evaluación de riesgo

Además de calcular el rendimiento potencial de una inversión, los analistas financieros también miden los riesgos asociados. Este trabajo implica la identificación de factores que podrían afectar adversamente a la rentabilidad de una inversión.

En definitiva, el analista financiero estudia el mercado y las opciones de inversión existentes para trasladar a sus clientes informes, análisis y recomendaciones.

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