¿Qué es el home staging y en qué consiste?

• Limpiar la vivienda a fondo.
• Despejar las habitaciones de muebles y objetos de decoración innecesarios. Las habitaciones se verán más amplias y los interesados podrán hacerse una idea mejor de cómo decorar el espacio a su gusto.
  
• Ordenar el piso, reubicando los muebles en los sitios en que queden mejor. Poner una mesita en la terraza o un pequeño escritorio en la habitación harán ver al comprador nuevas posibilidades (desayunar en el balcón, tener un lugar en casa para teletrabajar) para su futuro hogar que no se había planteado.
  
• Despersonalizar la vivienda, eliminando de la vista objetos personales, fotografías de la familia, adornos, etc.
  
• Reparar pequeños desperfectos: una puerta que no cierra bien, un arañazo en una mesa, un tirador roto, etc.
  
• Pintar la vivienda si es necesario. Será más fácil de vender una casa toda recién pintada en un tono neutro -blanco o beige- que si una habitación está de cada color, hay manchas de rotulador en una habitación infantil, etc.
  
• Decorar con elementos neutros (por ejemplo, unas colchas lisas, algún cojín sobre las camas, una manta amorosa en el sofá) y un toque natural (un centro de flores, unas plantas, etc.)

Home staging: antes y después

Siguiendo estos pasos el home staging consigue que al ver fotos del antes y después de una vivienda esta no parezca la misma. De hecho, estas técnicas de home staging deben acompañarse de unas fotografías a la altura: imágenes bien iluminadas, enfocadas, con detalles de la vivienda... Hay que tener en cuenta que los anuncios son el primer filtro para quienes están pensando en comprar un piso, por lo que no prestar atención a este aspecto puede echar por tierra todo el buen trabajo realizado en el home staging.

En definitiva, lo que pretende el home staging es hacer más atractiva la casa para los posibles compradores y lograr que se venda lo antes posible. Un home staging bien aplicado incluso puede hacer subir el precio de venta de la vivienda.