Tecnología blockchain, ¿haría la pesca más sostenible realmente?

El cuidado de la biodiversidad marina es crucial. La sobreexplotación de los recursos pesqueros, debida en parte a causa de la pesca ilegal, somete a los océanos y mares a una presión creciente y poco sostenible en el tiempo. Ante esta situación, los avances tecnológicos emergen como una posible solución. Pero, ¿cómo podría la tecnología blockchain hacer que la pesca sea más sostenible?

¿Qué es la tecnología blockchain?

La tecnología blockchain consiste, de manera general, en una cadena de bloques de operaciones o base de datos de carácter descentralizado y público. Este sistema permite generar información compartida a la que solo pueden acceder sus miembros, una red de ordenadores llamados nodos, que validan y registran las diferentes transacciones de manera segura y permanente.

Esta tecnología se hizo famosa por su papel en la criptomoneda bitcoin, pero su aplicación va mucho más allá de las transacciones financieras. Así, lo que nació como una herramienta para optimizar los procesos relacionados con las finanzas ha conseguido abrirse camino entre diversas áreas de la industria y la sociedad.

Esta clase de registro descentralizado e inmutable de todas las actividades a lo largo de la cadena de valor de un producto es una de las soluciones principales que la tecnología blockchain aporta frente a la complejidad y opacidad de ciertos procesos.

Tecnología blockchain: una solución para contrarrestar los efectos de la pesca ilegal

Los usos de la tecnología blockchain no paran de multiplicarse, desde las finanzas, pasando por la educación y la energía, hasta llegar a la pesca. Cuando se trata de esta última, la tecnología blockchain puede desempeñar un papel fundamental en la creación de una red de suministro transparente y confiable.

Una de las principales ventajas que la implementación de la tecnología blockchain tendría para el sector pesquero sería frenar las prácticas ilícitas e insostenibles. Por este motivo, son varios los países que están empezando a integrar el blockchain para mitigar la pesca ilegal mientras se protege la biodiversidad marina.

La cadena de suministro pesquera es extremadamente compleja, con múltiples intermediarios involucrados, lo que dificulta la identificación del origen y la trazabilidad de los productos pesqueros. No obstante, al implementar la tecnología blockchain, es posible registrar de forma segura cada etapa del proceso y de la cadena de suministro. Así, cuando se produce una captura, esta se puede registrar en la cadena de bloques, indicando la especie, el tamaño, la ubicación y la fecha de captura. A medida que el pez pasa por diferentes manos en la cadena de suministro, cada transacción puede registrarse y vincularse a la información original.

El desarrollo de esta metodología convertiría el sector pesquero en un ambiente más transparente y seguro para cada miembro de la cadena de suministro. Además, su funcionamiento es más simple de lo que parece. El registro comienza en el momento en el que un pez es capturado, colocándole el etiquetado de identificación a través de radiofrecuencia (RFID) y un código de respuesta rápida (por ejemplo, un QR). De este modo, se recopila información sobre el viaje del producto cada vez que este atraviesa un punto a lo largo de su recorrido hasta el consumidor.

Con tanta información desde un inicio, se podría dar por sentado que todo aquel producto pesquero proveniente de orígenes poco confiables quedaría descartado por el propio funcionamiento de esta red pública. Cada vez que la mercancía llegue a un lugar de destino, los dispositivos que se hayan instalado en los buques, muelles o fábricas de procesamiento detectarán aquellas etiquetas que se pusieron en los pescados y cargarán en automático la información proveniente de la base de datos del blockchain.

¿Cómo puede ayudar la tecnología blockchain a la industria pesquera?

Los sistemas de software basados en blockchain son capaces de hacer llegar la información desde la captura hasta el destino final. De esta forma, se eliminan intermediarios o productos de procedencia dudosa y todos los participantes de la cadena de suministro quedan interconectados: pescadores, distribuidores, procesadoras, supermercados, restaurantes y consumidores.

Además, la tecnología blockchain también puede ayudar a combatir la pesca ilegal, una de las principales amenazas para la sostenibilidad de los océanos que representa hasta el 26% de la captura total, lo que equivale a miles de millones de pérdidas cada año. Al tener una cadena de bloques transparente, sería mucho más difícil para los pescadores ilegales operar sin ser detectados. Cada captura ilegal podría ser identificada y rastreada, lo que permitiría a las autoridades tomar medidas y sancionar a los infractores.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la tecnología blockchain por sí sola no puede resolver todos los desafíos de la pesca sostenible. Aunque puede mejorar la transparencia y la rastreabilidad, sigue siendo necesario un apoyo a través de la cooperación internacional y un fortalecimiento de las regulaciones para abordar de manera integral el problema de la sobreexplotación pesquera. Asimismo, la adopción de la tecnología blockchain requeriría la implantación de una infraestructura y una capacitación adecuadas, especialmente en áreas donde la pesca es una actividad predominante.

Por tanto, la tecnología blockchain ofrece un potencial significativo para hacer de la pesca un sector más sostenible, con dos ventajas fundamentales. En primer lugar, el proporcionar transparencia y trazabilidad en la cadena de suministro pesquera puede ayudar a garantizar que los productos pesqueros provienen de fuentes sostenibles y cumplen con las regulaciones. En segundo, y como consecuencia del primer punto, el blockchain puede ayudar a combatir la pesca ilegal al dificultar que estos pescadores operen sin ser detectados.

No obstante, la implementación exitosa de la tecnología blockchain requerirá una colaboración global y un marco regulatorio sólido. Solo a través de un enfoque integral se podrá lograr un futuro sostenible para la pesca y los océanos.